Escrito por Peter Farley www.4truthseekers.org
 
Probablemente nadie sabe mas que yo que tan difícil es cambiar, es más, se pudiese decir que yo escribí el libro sobre eso.
 
Hace seis o siete semanas antes de irme de San Diego para hacer trabajos de rejilla en Florida, estaba trabajando con una persona del grupo a la cual GUIA le estaba diciendo firmemente que necesitaba comprar un carro nuevo; y como somos tan apegados a las viejas maneras de tratar con la vida, Ej.: utilizar nuestra mente para encontrar lo que pensamos que es mejor para nosotros dada nuestra circunstancia limitada, ella se rehusó en hacerlo. Hoy al llegar a San diego, la primera cosa que escuche fue que fulanito de tal tuvo un accidente donde el carro quedo irreparable, y para empeorar la lección, fulanito de tal ha comenzado a buscar comprar un carro nuevo para remplazar el viejo al cual estaba tan apegado.
 
   Hay una ley espiritual que dice si estamos muy a pegados a cualquier cosa, el Espíritu nos lo quitará para demostrarnos que no lo necesitamos. Podemos tener lo que nuestro corazón quiera siempre y cuando no nos apeguemos a ello, porque si hacemos esto bloqueamos el fluir de las cosas en nuestra vida, y esto funciona tanto con objetos como con personas.
 
¿Cómo sería si te paras por un minuto para imaginarte este estado de tener todo lo que NECESITAS sin el dolor o la preocupación de estar apegado a ello? La lección más difícil que tuve que aprender en mi entrenamiento es que este es un universo abundante y que el Espíritu y la Orientación quieren, más que yo, lo que es mejor para mí. Retener las cosas para nosotros, y  sofocarlas como lo hace Lenny, el personaje grande y corpulento de la novela clásica de Steinbeck “Of Mice and Men”, solo nos conlleva a terminar sin ellas.
 
El apego es lo que detiene el flujo para que todas las cosas buenas de nuestra vida nos vengan, y nos deja con una sensación de escasez y de no ser amado, y entregarse a la corriente solo nos trae todos los días prueba de lo mucho que somos amados.
 
La orden mas alta de Maestros es la del Varagi (Varag significa desapego).  El desapego no implica que no amas o tienes pasión por la vida, de hecho tienes diez veces, mil veces más pasión y cariño por la vida porque no estas tratando de controlar ni manipular a tu antojo el fluir del río (Espíritu). Como New Orleáns se dio cuenta, y muchas otras ciudades y países pronto se darán cuenta, esto de tratar de controlar el fluir del río no funciona. Ir con el flujo del río, trabajar CON la naturaleza en lugar de tratar de controlarla; ser un vehiculo PARA el Espíritu, no manipulador DEL Espíritu, es la manera en la cual la vida funciona para el propósito mayor de todos.
 
Si la verdadera espiritualidad fuese fácil, cada uno de nosotros ya sería Maestros y no necesitaríamos estar aquí en carne y hueso. Sin embargo, el Espíritu les da a las personas las lecciones que NECESITAN, no las que quieren.
 
No he encontrado un “gigante espiritual” que no haya llegado donde está hoy por ningún otro medio que no haya sido el de entregare a este proceso de ser un compañero de trabajo con la Madre Naturaleza, con el Espíritu, con su propia  Guía superior.
 
Esta es la misma Guía la mayoría de las personas dicen que no pueden escuchar simplemente por excusa porque no están listos para entregar su propia voluntad para obtener algo mejor en sus vidas.
 
Podemos seguir aprendiendo lecciones eternamente de manera en que fulanito de tal lo esta haciendo, ó como lo hice yo alguna vez, ó como todos los demás lo están haciendo, ó podemos entender el proceso y rendir nuestra propia voluntad a ese propósito mayor y facilitar la entrada hacia el flujo de las cosas donde nuestra voluntad trabaja en cooperación con la Voluntad Mayor para el bien mayor de todos. Cuando la Orientación nos dice que hagamos algo, ¿no es para el bien mayor de todos?
 
¿Te quedarás sin perdón por dejarte llevar, por no sentirte atado a esa pequeña e insignificante cosa que piensas que es tan querida? ¿De verdad puedes llegar a poseer el ser de otra persona? Deja al objeto o a la persona ir, y como la mariposa de la que tanto escuchamos, averigua lo bien que se siente verla regresar hacia ti en maneras que nunca pensaste posible.
 
  Ejercicio 1: Practica soltar tu apego de al menos una cosa por día y presta atención a las señales espirituales para ver lo que el Espíritu de verdad piensa que deberías tener y lo mucho mejor que es para ti. Hasta que tú también estés listo para entregar tu voluntad al Espíritu, toma algunos pasos diarios para DEMOSTRARLE que verdaderamente te importa.
 
Con Amor y mis mejores Deseos, Peter